Respirando agitada mente y moviéndome de un lugar a otro sin descanso, la obscuridad de la noche me puede ver retorcerme dentro de mi y es así como uno de los tormentos nocturnos más extraños de mi vida quiere escapar de mi mente pero no lo logra... "Salgo de mi casa, mi antigua casa, aquella que aún recuerdo cuando muevo piezas de mi mente, un hogar de niñez vuelto a la vida esta vez en una fantasía nocturna. Voy camino comprar algo que no logro recordar, pero en el camino me encuentro con ella, la persona que de un tiempo a esta parte ocupa todo recuerdo y deseo en mi. Era raro, iba con una amiga del brazo, no logro distinguir quien es la mujer que la acompañaba, pero de igual manera caminé hacia ella y dije con voz algo lenta "Hola" y ella me responde con tono frío "No te quiero volver a ver", aquella frase atravesó mis oídos como una bala que proviene de un arma cerca de mi cabeza, ¿Que era lo que estaba ocurriendo?. Me presté a preguntarle que era lo que sucedía, pero su amiga en un movimiento brusco y rápido la alejó de mi sin dejarme alguna oportunidad de siquiera hablar con ella, la veía alejarse, su rostro era frío, ella me ignoraba y yo no podía ni siquiera moverme.
Empieza en mi una serie de remordimientos y una búsqueda de responsables por lo que estaba pasando de manera desesperada. No lograba encontrar el motivo de porque ella había acabado conmigo de esa manera, tan fría y dolorosamente diabólica. Buscaba responsables pero no los encontraba y me encontraba en una tormenta con truenos y relámpagos en ella, podía ver la lluvia frente a mis ojos y podía sentir el aire que se colaba en mis huesos, era todo tan tenebroso y solitario, no tenía nadie a mi alrededor tan solo mi recuerdo de la imagen de su rostro dolido y fuera de lugar.
Era mi hogar desde pequeño y pude ver algunos de mis familiares cerca, me precipité hacia ellos tratando de buscar la respuesta a toda esta pesadilla, pero ellos no sabían nada en lo absoluto y de hecho ni siquiera conocían a la mujer por la que tanto sufría y fue en eso que de pronto alguien con voz desgarradora grita "Pelea!" y mis primos corrieron hacía una masa de gente que venía enfurecida comenzando así una disputa que hasta el momento para mi no tenía sentido, pero luego pensé que alguno de ellos podría haberme arrebatado el amor que perdí y sin ningún tipo condolencia comencé a golpear brutalmente a personas cuyo rostro nunca en mi vida vi. Era todo tan obscuro y violento y mi ira por creer algo que divagué me convertía en ese momento una máquina de violencia que golpeaba sin discriminación alguna como si todo ello fuera a aliviar el inmenso dolor del amor perdido, violencia que se consumía poco a poco como las brasas ardientes que dejan solo cenizas ensangrentadas y puños rotos que después de todo aumentaban mi dolor. Logré reunirme otra vez con mis primos y ellos podían ver mi dolor a través de mis ojos, yo gritaba una y otra vez al vacío "Que está pasando!" "Quiero a mi Ana de vuelta".
Despertaba, creí que todo era un sueño, pero todavía sentía el vacío dentro de mi. Miré la hora, no había ido al trabajo, no sabía lo que me estaba pasando en realidad. Salgo a la calle y una niebla inunda todo lo que tiene a su paso, la gente en la calle se veía furiosa, como demonios vagando por las calles tratando de destruir todo lo que estuviera a su paso, yo tenía frío y además el dolor de haberla perdido todavía me perseguía. Entré a una de las casas que parecía segura y en ella habían dos mujeres, totalmente nuevas en mi vida, ellas me contaban que la furia de la gente se debía a la pérdida que sufrían todos de una manera singular. Yo les narraba mi desgraciada historia y ellas reconocieron mi dolor, pero una de ellas me confesó lo que era para mi algo perdido. Ella me dijo que había hablado con ella, que le había dicho que yo la estaría esperando en cierto lugar y a cierta hora un día atrás, pero yo nunca dije eso, fue ella quien la engañó y en mi lugar solo mandó a alguien más que la consolara por mi ausencia inminente. Pero que!! Porque hiciste eso!! gritaba desesperado y ella me dijo "tan solo por diversión" y en ese momento mi ira se hizo incontenible y quise mandarlas a las dos al infierno de donde habían salido, pero se esfumaron y solo dejaron de rastro risas hacía mi dolor. Mis manos temblaban y tan solo pensaba en que podía estar en cualquier lugar con alguien más por algo que no había hecho.
Trataba de buscarla, pero no estaba por ninguna parte, me invadía la impotencia de no poder decirle que todo había sido un engaño de alguien más para ponerla en mi contra, pero no lograba nada, estaba perdido en medio de una niebla que apenas me dejaba ver mi mano frente a mis ojos. Caí al suelo y me sentía decepcionado, ella no había creído en mi y prefirió creer en alguien más y ahora no estaba conmigo, estaba solo, tenía miedo y mis manos seguían temblando constantemente, no la encontraba por ninguna parte y ya me estaba quedando sin fuerzas, mis esperanzas se agotaban y solo podía ver su rostro en el momento que me ignoró y abandonó. Todo era tan doloroso que tan solo me quedé en el suelo preguntándome una y otra vez porque me sucedía todo esto si yo no tenía la culpa, porque ella no había creído en mi, porque ahora estaba solo en medio de la niebla con mis manos temblando y como única compañía un miedo que me abrazaba y me llevaba lentamente a un sueño eterno... "
Despierto asustado, ¿Estás ahí para mi? ¿Me sigues amando?... se perdían en el eco del sueño...
