sábado, 15 de agosto de 2009

Sombra del Destino...

Implacable es el llegar a casa sabiendo que algo no está bien, que hay algo de que preocuparse, terrible puede ser la imaginación cuando juega con fuego como si fuera inevitable el deseo de quemar cada rincón de las dudas, abrumador sentido de la realidad es el que inunda una palabra hermosa y la ahoga con sus incontables empujes de arrogancia y orgullo, ahogado en orgullo es lo que figura como una muerte no deseada y tiende a guiar pasos falsos que sin duda llevan al arrepentimiento y a la cobardía, malgasto de fuerzas es tratar de buscar una explicación a tanta torpeza de movimientos desordenados y sin sentido, se hace más larga la brecha entre el interior y el exterior, cada golpe al aire aumenta mi cansancio y al final del día estar exhausto no es una opción viable, carezco de iniciativa cuando siempre la tuve entre mis filas, he perdido algo de lo que hacía de mi ir hacia el lugar correcto, las señales han llegado cada vez más tarde y para efecto de ello aparecen cuando ya no hay vuelta atrás como si fuera un juego perverso del destino estar a ciegas bajo su sombra imponente y marchitadora de sueños de una noche lunática, robando tu aliento y haciendote caér por una pendiente de inusuales formas e imágenes fragmentadas por el destello de muchos lamentos en vano que al final de todo solo sirven para alimentar más aún un alma despiadada como la del destino al acecho de cada latido del corazón, de cada respiro y cada movimiento sincronizado para que todo parezca un baile en perfecta armonía, pero que después de todo no es más que una danza diabólica que lleva directo a un abismo eterno de pensamientos que corroen la memoria y mutilan cualquier vestigio de optimisto escondido esperando a ser descubierto, solo lleva a una caída sin fin de falsas ilusiones creadas por nuestra propia mente capaces de quitarnos el sueño y atormentarnos con su presencia no deseada, sabiendo que somos incapaces de hacer quite a cualquier ocurrencia malévola y falta de argumentos, pareciera una pesadilla inducida sin ningún motivo aparente, tan solo basta un momento a solas para caer en los brazos de la amargura y pasar por ardientes palabras que encienden odios sin fundamentos. El clima puede no ayudar mucho, el frío aire que respiro no hace más que aumentar un fuerte campo que cubre mis pensamientos para solo ser parte de mi y nadie más, nadie más podría siquiera deducir cual es el real estado de mis divagaciones, en un frío torrente de situaciones imaginarias impulsadas por vivencias pasadas, potenciadas por cosas que he visto, antecedentes reales antes de una catástrofe anunciada, cual es la real posibilidad de que mis miedos se hagan realidad y puedan atormentarme antes y despúes de que todo ocurra, cual es el motivo de todo ello si es que llegará a ocurrir si no he dado algún paso en falso, por que sombras del pasado vuelven cuando no son deseadas y terminan por quere destruir lo que hasta ahora he logrado, que se debe hacer cuando tus mayores miedos no dependen de ti sino que son traídos por situaciones anómalas y deformes sacudidas y arrojadas por una serie de sucesos que te hacen sentir que todo aquello ya lo habías vivido alguna vez, será que algo esta ocurriendo y no se que pueda ser y es que de un momento a otro se siente como si cada predicción fuera una realidad sin posibilidades de cambiar de ninguna manera o puede que las haga realidad de solo inundar de motivos el motor de una trágica imágen de la que no desearía ser parte, no puedo buscar respuestas en las señales, por el momento no confío para nada en ellas, tampoco puedo buscar respuestas en los demás ya que no es algo que no haya oído antes, sé con certeza que las respuestas que busco yacen en mi, en algún lugar de mí, pero puede que estén selladas y el acceso a ellas me las pueda dar un hecho en particular, sal de donde quiera que estés, tarde o temprano la verdad sale a la luz...